Antes incluso de salir ya llegan los primeros cambios.
Como siempre pasa, estaba claro que antes siquiera de empezar el viaje iba a surgir algo que hiciera modificar los planes. En realidad los planes eran demasiado poco concretos; una fecha aproximada de salida y una ruta dibujada sin apenas comprobar su viabilidad. Así que los cambios no son, en fin, ninguna sorpresa.
El primero se refiere al punto de salida. India, pensaba yo, por la recurrente idea de comprar allí una Royal Enfield y empezar el viaje delante de la misma puerta de la fábrica. Una rápida búsqueda en Internet y descubro lo complicado de registrar un vehículo indio a nombre de un extranjero. Una búsqueda un poco más concienzuda que incluye mails intercambiados con cerca de 70 concesionarios diferentes de Royal Enfield en India, con viajeros, motoristas, empresas de alquiler, embajadas, etc. y confirmo que mejor buscar otra solución.
Se comenta que en Nepal la cosa está más fácil, y de pura casualidad localizo la web de Ángel, sevillano que en su camino a Australia en una Teneré rompe el motor y se ve obligado a buscar otra moto con la que seguir su viaje. Me pongo en contacto con él, y otra casualidad, está en Nepal comprando una Royal Enfield, que en unos días consigue registrar a su nombre. Así que yo seguiré los mismos pasos. Punto de inicio de viaje cambiado definitivamente.
Segundo cambio: mientras estoy entretenido con estas cosas de mails, mapas, libros de viaje, y otros preparativos recibo una llamada de teléfono de un amigo, Indo.
-Hola Jorge, ¿cómo va eso, estás ocupado?
-Hola Indo, estoy trabajando pero puedo hablar, cuéntame.
-Pues no te lío mucho, solo decirte que he hablado con Ángel (no el sevillano) y Perico, y.... que nos vamos contigo de viaje.
-¿Qué dices, en serio? (yo ojiplático) ¿Y cuándo salís?
-Tu vas en enero, ¿no? Pues nosotros también.
-¿Y para cuánto tiempo venís?
-Tu vas sin fecha de vuelta, ¿no? Nosotros también. Bueno, no te entretengo más que estás trabajando, ya hablaremos... Agur
-Ag.... piiiii piiiii piiiii piiiiii
Yo me estaba organizando para hacer el viaje en solitario porque siempre hay gente a la que le gustaría apuntarse pero no es fácil que alguien cercano disponga del tiempo, ánimo o decisión para dar el paso y embarcarse en un viaje sin fecha de vuelta. Así que aún menos esperaba compartir carretera con 3 personas más. Pero... ¡qué 3 personas!
Otro día los presentaré en esta página, con una entrevista a cada uno porque son de esa gente a la que puedes estar escuchando horas y horas, sobre viajes y sobre cualquier tema del que hablen y siempre tienen cosas de las que aprender.
Como avance a esa presentación os diré que en 1995 volaron a India junto a Bea y Nekane, compraron 4 Royal Enfield nuevas de 350c.c. y volvieron a casa por tierra después de un intenso viaje lleno de aventuras y emoción. Aún conservan las 4 motos ¡con sus matrículas indias y todo!
Y su plan para acompañarme es enviar esas joyas a Calcuta y continuar juntos el camino hacia el Este cuando yo baje de Nepal con la mía.
Tendremos tiempo para que me cuenten sus historias de cuando eran pilotos del París-Dakar, o de sus viajes a Afganistán a mediados de los 70.
Ayer tuvimos la primera reunión los 4 juntos para ir organizando este gran cambio en mis planes del que estoy muy contento porque es un honor para mí compartir un viaje con estos ‘monstruos’.
Os dejo unas fotos de la reunión, en la que brindamos con la mejor cerveza artesanal de la zona, de los amiguetes de Bidassoa Basque Brewery, y en la que tuvimos de invitada a la Royal Enfield de Indo, que lucía casi más preciosa que nueva.
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